martes, 15 de marzo de 2011

Gustos y animadversiones

A tenor de lo leído últimamente, parece que baloncesto europeo está peligrosamente incomprendido por muchos aficionados, se dice que es un baloncesto amarrategui, rácano, ultradefensivo [...] Preocupa (al menos en mi caso) que gran parte del aficionado solo les guste un partido en función de la gran cantidad de puntos que se pueda generar. Si realmente el baloncesto bonito se tradujese en anotar mucho, los Golden State Warrios serían un equipo totalmente comprable a los Lakers del Showtime. Y seguramente tendrían ya algún título de la NBA en sus vitrinas.

Resulta una obviedad decir que este deporte en Europa se ha hecho mucho más táctico, más de pizarra, de transiciones ofensivas más pausadas, de ritmo más lento y, por consiguiente en muchos casos, los marcadores son o tienen posibilidades de ser más bajos. Esto tambien pasa en la NBA, aunque allí si han perdido mucho poder táctico en favor de un uso excesivo del bloqueo frontal. Que claramente ha limitado la riqueza del juego.

En nuestro continente también se usa mucho este tipo de bloqueo, en muchos casos demasiado, pero sigue siendo un juego con más y mejores variantes tácticas, tanto ofensivas como defensivas. Al igual que pasa en la NCAA. ¿Por qué el baloncesto universitario en USA goza de tanta popularidad si los marcadores son muy similares a los FIBA? Es una paradoja que se hable bien o mal en función de lo que más nos conviene ignorando realmente donde están los problemas y las deficiencias de este deporte.

Las reglas FIBA han experimentado un cambio este año, retrasar la línea de tres puntos hasta los 6,75, o la de hacer el perímetro más grande sin anchear la cancha. Ese es uno de los pequeños problemas, que con la nueva normativa las pistas se hacen más estrechas y las quejas de jugadores y entrenadores está siendo una constante puesto que origina muchas pérdidas de balón tontamente.

Pero por encima de todo, sigo viendo como uno de los problemas más notorios en estos tiempos que corren la poca permisividad de los árbitros en los contactos físicos. Se para en exceso el juego, se duerme mucho el crono, partidos con muchas faltas es sinónimo de poco ritmo en el juego, y eso es evidente que no beneficia al espectáculo. Una ley no escrita que debería cambiar, porque no viene mal recordar que este deporte es más físico que hace veinte años, y por tanto no se puede pitar con la misma rigurosidad que antaño.

Se habla de las pobres audiencias televisivas de la ACB y muchos le echan la culpan al estilo de juego del que estoy mencionando. Pero no creo que eso sea así realmente. El deporte de la canasta siempre ha sido mucho más minoritario si lo comparamos con el fútbol. Las audiencias siempre suelen se oportunistas. Un ejemplo claro es la Fórmula , 1que hasta hace una década no la veían ni un millón de personas, (datos reales confirmados por TVE) pero con el boom de Fernando Alonso dichas audiencias se multiplicaron por seis. Incluso superando en muchas ocasiones al deporte Rey. Y al igual que ha pasado cuando nuestros chicos de oro ganaron el Mundobasket de Japón. Todo fueron halagos, alabanzas, y muchas camisetas vendidas, pero al final, al final parece como si todo muriera ahí. El último dato que dió en Twitter el comentarista de Teledeporte, Arsenio Cañada referentes a las audiencias, hablan de 250.000 espectadores de media en el último partido de liga el pasado sábado entre Unicaja y Bilbao basket. Las medias de esta temporada están rondando el medio millón. Ciertamente parece poco, porque siempre hay que aspirar a más, y teniendo en cuenta que la final de copa del pasado mes de febrero entre Barça y Madrid superó los dos millones, segunda emisión más vista en la historia de Teledeporte, con lo cual es indicativo de que el mundo de la canasta interesa, pero desgraciadamente solo cuando nos conviene. Ya casi no hay aficionados puros a este maravilloso deporte, que sepan entenderlo y disfrutarlo sin distinción de colores.

El producto es bueno, pero también hay que saber venderlo, para así sacarle rentabilidad (económica) y, eso es mayormente es responsabilidad de los medios, porque en los tiempos que corren, cualquier deporte que se precie está mal de dinero, y se necesita de un marketing brutal para captar la atención de cualquier persona o empresa.

Deben cambiar algunas reglas del juego para mejorar, y también debe cambiar la manera de pensar de muchos aficionados, bastante más familiarizados con la NBA. Eso hace daño.

Saludos







domingo, 6 de marzo de 2011

"Los devora entrenadores"


Hace unas semanas leí una entrevista a Javier Imbroda donde decía que el Madrid es un -devora entrenadores- Esa afirmación es la cruda realidad de una entidad que da constantemente palos de ciego, se crea mal ambiente de forma innecesaria, aún cuando los resultados son mucho mejores de lo que parte de la opinión pública nos vende.

Hay que aceptar de una vez por todas que no es nada fácil ganar títulos, que ser subcampeones no quiere decir que el proyecto no esté fructificando en algo positivo. Llegar y besar el santo no es algo que se haga con un simple chasquido de dedos, los aficionados no tienen paciencia, y menos aún cuando ven al eterno rival jugando bien y ganando títulos. Un proyecto necesita tiempo, y paciencia. Mientras no se de continuidad a un programa baloncestístico es imposible hacer nada de provecho, eso hay que asumirlo. La competencia entre equipos es brutal, y los jugadores tambien tienen que tener actitud, una actitud 100% ganadora que no han mostrado en muchas ocasiones, y de eso Messina no creo que sea tan culpable de ello.

Muchos aficionados del Madrid pedían la dimisión de Ettore Messina, aún cuando éste les ha metido en cuartos de final de la Euroliga, cuando los ha llevado a jugar la final de copa del Rey este año, y que perdieron contra el actual campeón de Europa, y subcampeón de liga en un digno partido, llevado al terreno que más le interesaba a los blancos.

Una malísima imagen dada el pasado jueves en la Euroliga en la caja mágica frente al Montepaschi Siena ha acabado por poner punto y final al matrimonio Madrid-Messina. El técnico italiano dijo que se iba para que no hubiese división en el vestuario, si iba por el bien del equipo. Algo que da qué pensar de como estaba la situación con los jugadores. Aunque desde el club han tratado de desmentir esos rumores de "mal rollo".

En el puesto de Messina quedará su ayudante de toda la vida,"Lele" Molin hasta el final de la temporada, luego ya se verá, pero Pepu es el nombre que suena con más fuerza. Y los aficionados ya han dejado claro en el frente al DKV que no quieren al ex selecionador y entrenador de Estudiantes.

Da igual el entrenador que llegue a la casa blanca, si no se consiguen títulos de forma inmediata, dicho entrenador estará entre la espada y la pared. Así es este negocio. No se valora el trabajo de un entrenador hasta que no llegan los trofeos. Ley de vida.

Saludos